El primer mapa genético de la comunidad de bacterias de los suelos de la Pampa húmeda, anunciado por investigadores de un consorcio integrado por once instituciones públicas y privadas de Rosario, Buenos Aires, Quilmes y La Plata, está abriendo la puerta a nuevos desarrollos para mejorar la productividad de los cultivos.
Así lo explicó a la Agencia CyTA uno de los líderes principales del proyecto, el doctor Martín Vázquez, investigador independiente del CONICET y director de la Plataforma de Genómica y Bioinformática del Instituto de Agrobiotecnología de Rosario (INDEAR), para quien el nuevo mapa propicia el desarrollo de productos “que se adaptan mejor a diferentes agroecosistemas”.
La base de datos, apodada PAMPA, surgió del análisis de 130 muestras de suelo de cinco localidades diferentes de la Pampa húmeda, sujetos y no a explotación agrícola. El “set de datos” está compuesto por el equivalente a casi 3 mil genomas bacterianos completos. De acuerdo a los investigadores, casi la mitad de los organismos del suelo pertenecen a grupos taxonómicos muy poco estudiados, e incluso a veces no clasificados.
Según informó Vázquez, a partir de los datos de PAMPA, la compañía SEMYA –creada por Bioceres y Rizobacter Argentina- está formulando una generación de “bioinoculantes” que podría llegar al mercado en 2017.
Además de INDEAR, algunos integrantes de esa alianza, que contó con el apoyo de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica, provienen de las Facultades de Agronomía y de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA, de la Universidad Nacional de Quilmes y de la Universidad Nacional de La Plata.
Fuente: DiCYT